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Doctorado en libertad

Escrito por: Abog. Beatriz Morel.

Básicamente, si nosotros mismos no hacemos algo por nuestras familias, nadie se ocupará de ellos. De esta manera se está generando más pobreza cada día, ya que se le priva de oportunidades a personas menos posibilitadas en creatividad para progresar.


El gobierno nacional no se ocupa en absoluto de garantizar bienestar a su pueblo en general. Unos cuantos ricos, cada vez más ricos y los pobres cayendo cada día en pozos más profundos. Es una pena que nuestra educación en descenso esté sufriendo nuevamente otra huelga general, paralizando a todo el país. Y, bien sabemos que la calidad de la educación es pésima aquí, un bachiller hoy día no sirve ni para un básico secretario, por no saber expresarse, por desconocimiento de modales y un conocimiento muy superficial de lo académico.

Recuerdan ustedes el tan promocionado "referĂ©ndum" en donde se gastĂł unos 30 mil millones de guaranĂ­es con una mĂ©ndiga participaciĂłn, resultado de la pĂ©sima educaciĂłn cĂ­vica con una clara demostraciĂłn de lo vacĂ­o y vanidad en cuanto a responsabilidad. Pero lo que rescato del sonado referĂ©ndum es que "habĂ­a sido hay dinero para gastar" o, ¿de dĂłnde saliĂł tal recurso?

Sin embargo, sigue habiendo niños con hambre resultado de unos padres que no tuvieron oportunidad de ir a la escuela, de aprender un oficio sino, solamente se han dedicado a procrear sin entender que traen hijos para la calle. 

El gobierno ausente, entregĂł a cada ciudadano un certificado de "Doctorado en Libertad",  esa libertad venimos administrando como podemos desde el año 1989 con la caĂ­da de Stroessner. Sin entender cĂłmo usar nuestro nuevo estado, de la LIBERTAD se ha pasado al LIBERTINAJE. Cada uno hace lo que le parece.

Si hay 30 mil millones para gastar en un dĂ­a, seguro que habrá más para la educaciĂłn y brindar mejor calidad de vida a los docentes, capacitarlos más para brindar más beneficios a los niños y jĂłvenes estudiantes del Paraguay.  

TambiĂ©n pienso que habrá reservas para la salud, tantos enfermos renales en nuestro paĂ­s que sufren por falta de máquinas para diálisis, enfermos de cáncer que no consiguen dinero para la compra de sus medicamentos. Los puestos de salud abarrotados y sin medicina. En las calles y casi en todas las ciudades del paĂ­s, se observan los niños, jĂłvenes y adultos que mendigan una moneda, algunos para comprar alimentos, otros para saciar sus vicios del alcohol, droga, prostituciĂłn o sencillamente por vagos. 

Es necesaria la obligatoriedad de un carnet de culminación de los estudios básicos, como antes a los hombres se les obligaba portar la Baja del servicio militar. Y a quien no tenga que se los multe de alguna manera.