El Clericó del Paraguay

Edición 133/2019

El clericó es una bebida refrescante, protagonista del festejo al aire libre. Se prepara en jarras y tienen una mezcla de frutas maceradas como protagonistas. Además, repone energía, despierta el apetito y calma la sed.

 Las más sabrosas y exquisitas frutas de estación se reúnen con excelentes vinos para despedir el año, ya que es una de las bebidas tradicionales de las Fiestas de Fin de año en muchos países de Latinoamérica.

Su origen es contado en diversas versiones. Una de ellas dice que el clericó nació cuando el imperio Romano se apoderó de Francia y de Gran Bretaña. Estos países estaban dominados por los celtas, quienes para festejar el fin de año dedicaban esa noche al Samhain o “caballero de la muerte”.

Como los romanos tenían la costumbre de adoptar a los dioses de los pueblos que conquistaban, se apropiaron de esta celebración, pero como se daba en la misma fecha en que ellos adoraban a la diosa de las frutas, se dio una fusión entre ambas culturas, bebiendo un cóctel en base a frutas y bebidas.

Existen numerosas versiones y recetas de clericó, pero todas tienen la misma base: frutas, azúcar y vino.

Como somos seres en constante evolución y cambios, tampoco el clericot escapa de nuestra creatividad y, en lugar de vino colocamos sidra, algunos preparan sencillamente como ensalada de frutas, especialmente para los niños.

INGREDIENTES

* Frutas de tu elección (banana, manzana, durazno, uvas, piña, naranja, melon,  etc)

* Vino tinto

* Azúcar a gusto

* Abundante hielo

PREPARACIÓN

Lavar bien las frutas y cortarlas en cubitos más o menos iguales. colocar las frutas dentro de una jarra o bol. Añadir el azúcar, el hielo y el vino.

Obs: Si lo prefiere puede cambiar el vino por sidra o, simplemente con jugo de frutas naturales. También puede endulzar con edulcorante de ka´a he´ē en lugar de azúcar.